De regreso

Después de una temporada ausente el demon conocido como Cain había vuelto a la academia, lentamente sus pasos lo condujeron a la entrada de la misma, sus ojos carmesí se posaron en toda la construcción que componía la entrada, a sus ojos no había ningún cambio resaltable tal y como había supuesto.

Empezó a caminar de nuevo hacia el interior con su paso lento y cansino, parecía que de momento no había nadie así que no tendría que fingir, si la suerte le permitía no cruzarse con nadie avanzaría directamente hacia los dormitorios y una vez en ellos refugiarse hasta el día siguiente, después de eso… tendría que empezar la búsqueda de nuevo.

Tan absorto iba en sus pensamientos que el joven demonio no noto que no estaba tan solo como pensaba en la entrada, sin embargo el no lo notaria hasta que fuera demasiado tarde si es que aquel o aquella que estuviera allí reparaba en la peculiar presencia de el joven Cain.

Iva corriendo como una loca despues de haberme encontrado con Alejandra en aquella playa, aún no sabía porque iva corriendo y claramente jadeando por el esfuerzo cuando me crucé o mejor dicho le empujé a un extraño que no me daba muy buenas sensaciones...Me caí hacía atras despeinandome y haciendo que mi lazo rojo quedase pegado en su cara a causa del viento. Me quede en el suelo sentada y lo miré preocupada.

-¡Lo siento! No iva mirando...- me disculpé mirandolo y esperando a que se dignase a mirarme. No lo había visto antes, aunque no me era extraño aquel echo...yo era una alumna nueva aunque ya conocía a varios alumnos igual de perdidos que yo.

Un fuerte ruido se escucho en la entrada, una joven acababa de chocar con el demonio de ojos rojizo y el lazo de esta había quedado prendado en su rostro, en condiciones normales el joven demonio no hubiese dado mayor importancia a esto, habría sonreído y actuado como si nada, habría fingido ser agradable y que el incidente le había parecido gracioso, pero su plan de haber llegado hasta los cuartos de forma silenciosa unido a la bondad en la mirada de la joven hicieron que no le diera tiempo de ponerse la mascara.

- Que pasa? Es que no tienes ojos… o solo los tienes para mirar donde te colocas el lacito - mientras hablaba Cain agarro el lazo que se había quedado prendado a causa de el viento en su rostro y le se lo lanzo de malas maneras a la jovencita en el suelo - supongo que si.. Solo los tienes para mirar donde lo colocas - Le dirigió una altiva mirada, en la que se podía leer claramente un reto a que le contestara algo.

Me quedé alucinada al oile hablar de ese modo vale que me había caido y que por mi culpa el también, que mi lazo se había quedado en su cara pero haber el lazo había volado por si solo, o mejor dicho por culpa del viento, eso no era mi culpa ¡yo no controlaba el viento! solo el agua...y como siguiese con ese humor se le caería un buen cubo de agua por encima, se lo iva a ganar. Suspiré de mala gana y me levanté como pude cruzandome de brazos y sujetando mi lazo rojo en la mano.

-Ni que te hubiese maltratado...madre mia que humor y que sepas que no a sido mi culpa que mi lazo acabase en tu cara, ¡Malhumorado! -Me quedé mirandolo resignada, menudo encontronazo a eso si que se le llamaba entrada triunfal.

El ceño de el demonio se torció en una extraña mueca, mitad perplejidad, mitad enfado, en vez de asumir el echo de que había sido culpa de ella la chica le protestaba y lo llamaba malhumorado, como si lo que todo el mundo desease a primera hora es que apareciera una despistada corriendo, se golpease contra el y le pegase un lazo en la cara para después llamarlo malhumorado.

-malhumorado? Mira… “joven dama” prefiero ser un malhumorado que una jovencita inconsciente que corretea por ahí sin mirar, mas preocupada de donde lleva el lazo que de lo que puede pasar - tras esto una cínica y irritante sonrisa apareció en los labios de el joven demonio que miraba a la chica todavía en el suelo - y si esperas por casualidad que te ayude a levantar… ya puedes esperar.. - la sonrisa se intensifico en sus labios mientras añadía lo ultimo a la sentada chica.

Pero menudos modales, yo no iva mirando mi lazo simplemente iva corriendo y me choqué contra él ¿Tan malo era eso? Madre mia con que individuo había ido a econtrar. Seguí sentada en el suelo sin intenciones de levantarme mientras le dedicaba una mirada de odio. Podía ser un angel pero tambien podia ser desagradable si me lo proponía y eso era lo único que se merecía él.

-¡Yo no iva preocupada mirando donde tenía colocado el lazo! Simplemente iva corriendo y me choqué contigo ¿Tan raro es eso? ¿Nunca te has caido? Perdoneme "señor perfecto" si nunca te has tropezado con alguien...- Suspiré resignada y me decanté por colocarme el lazo nuevamente en el pelo- No estoy esperando a que me ayudes, mira tú por donde que el suelo es muy comodo.

Le dediqué la mejor sonrisa falsa que pude, quiza me estaba metiendo con alguien que no debía pero no era mi culpa que alguien no tuviese modales.

Los ojos de el demonio se entrecerraron ante las palabras de la impertienente joven, que si el no se tropezaba con la gente? pues no, siempre miraba por donde iba y si lo hacia era solo por que era necesario, no hacer nada inecesario... ese era su lema, ser lo que se suponia que un estudiante debia ser pero.. la esdtudiante esa, con su lacito, su bondad... lo estaba conseguiendo poner nervioso, lentamente se arodillo frente a la chica si perderla de ojo.

-ohhh... asi que el suelo es muy comodo, se me ocurre otro sitio mas comodo para alguien a la que el suelo se lo resulta tanto - muy despacio y para que ella pudiese seguir donde el miraba, empezo a torcer la cabeza en direccion a su derecha, a unos metros de alli, mirandola fijamente, se encontraba un pequeño recipiente para los papeles y basura que hubiese en el suelo, despues volvio a girar la cabeza hacia ella mientras le sonreia con la expresion mas dulce posible.

Observé nerviosa la basura ¿Qué me iva a meter hay? ¡Ni de palo! Empezé a recarcular mis posivilidades y rapidamente mi nerviosismo se volvío en una sonrisa dulce y amable. De esta no se libraría, aprobeché que estaba distraido mirando la basura para agarrar un hierro que había detras de mi espalda, y justo cuando se puso a mi altura al estar yo sentada el tener que agacharse agarré fuertemente el trozo de hierro y le dí con el en la cabeza haciendo casi imposible que lo parase al ser derrepente y al estar entretenido pensando en otras cosas. Me levanté de golpe del suelo esperando su reacción mirandolo divertida.

-¡Ni se te ocurra meterme en ese cubo de basura!- Grité furiosa mientras agarraba el trozo de hierro en mi mano, le había dado fuerte en la cabeza pero no como para dejarlo K.O