Paseando y despejando ideas

Desde que había llegado al mundo de los humanos y encontrado a mi Elegida, me encontraba algo mejor, pero si no lograba que esta fuera feliz y no fuera tentada por los demonios, mi misión habría fracasado y mi salud nunca se repondría del todo, había notado que si Anneke estaba en peligro, era como si no estuviera enferma, aquello savia que era por el lazo que unía a los humanos con los angeles, solo esperaba que ella pudiera olvidarse de lo que le habai pasado en el pasado y superarlo.

Ahora estaba paseando por el parque veía a varias parejas pasear, aunque eran pocas, iba de nuevo con una chaqueta para no pillar frió, mientras que me preguntaba donde estaría Anneke.

De repente note como Anneke entraba en el parque, el lazo entre los ángeles y los humanos también servia para saber si se acercaba el protegido, me gire y me quede esperando a que ella se acercara, el frió empezaba ha hacerse aun mas fuerte, esperaba que no dañara mas mi salud, o lo pasaría muy mal los días que seguían, sonreí cuando Anneke estaba cerca.

- [i]Hola ^^ hacia unos días que no te veía, creo que las dos hemos estado un poco ocupadas, jeje, y bueno al menos no he tenido que preocuparme por mi salud estos días, parece que esta estable[/i] -

Dije un poco avergonzada por el echo de que todo el mundo estuviera ya al corriente de mi delicado estado de salud.

Notaba algo raro en ella, como si hubiera estado cerca de un demonio, pero no estaba segura, debería de andarme con cuidado por si acaso esto era cierto, sonreí mientras nos sentábamos en el banco mas cercano.

- Creo que este año habrá mucha mas gente nueva que el año pasado, o por lo menos eso ha dicho el director ... ¿ has conocido tu ya a alguien nuevo ? -

Asentí a lo del nuevo chico, ojala no fuera lo que tanto me temía, savia por los informes que nos habían dado a los ángeles que este año si que habrían muchos demonios y que tenían la costumbren de escocer al mismo humano al cual protegía un ángel, aunque claro nosotros hacíamos lo mismo por el bien de lo humanos, aun así no me gustaba para nada que mi Elegida hubiera podido ser fichada por un demonio.

- Yo conocí a una extraña chica en la playa ... era demasiado animada >.< -

Sonreír ante su gesto de preocupación, lo cierto era que Anneke era la primera amiga que había tenido, y no me gustaba para nada el echo de tener que guardarme para mi lo que yo era, pero si se descubría ella corría el peligro de ser elegida por un demonio ... si es que no lo había sido ya ...

- No te preocupes Anneke, tengo salud débil, pero por lo visto poco a poco va algo mejor ^^ -

Correspondí muy alegremente al abrazo dado por Anneke, aun así notaba la tensión que esta tenia, savia lo que había sido de su vida antes de conocerme, por eso una vez que consiguiera el total de mis poderes había decidido convertirme en un ángel guardián, tendría poca libertad, pero no me importaba, Anneke para mi era muy importante, como aquella hermana que nunca tuve, ya que las mías me ignoraban por culpa de mi salud.

- Mira, por suerte aun nos quedan unos años más que estar en el colegio y espero que para entonces mi salud ya este del todo restablecida ^^ -

Savia que si Anneke se dejaba llevar por los demonios, mi salud empeoraría hasta el punto que podría morir.

Sonreí con una amplia sonrisa en el rostro y también estreche la mano a Anneke.

- Y que no se nos olvide jeje -

Me alegraba que se sintiera tan bien, y que estuviera relajada, aunque ese era por decirlo así mi trabajo, me gradaba de sobremanera y ya no lo hacia para conseguir mis poderes, si no simplemente por el echo de quería que esta nueva amiga estuviera bien quizás era por mi condición de ángel.

Cuando termino de hablar, por alguna razón, sentí como la luz de ángel, la cual me mantenía despierta y mantenía a raya mi delicada salud, pareció fortalecerse un poco, aunque no estaba segura del todo, antes de que pudiera hablar, al no estar mi cuerpo acostumbrando o preparado para esto, sentí un fuerte dolor en el pecho, donde se situaba dicha luz, me agarre fuerte el pecho por el dolor ...

- Anne... Anneke ... nece... necesito ir ... a mi cuarto ... -

- Lo ... lo ... siento ... -

Dije mientras intentaba andar, veía como a Anneke le costaba mantenerme, hasi que hice que mis alas aparecieran, peor no del todo, sino como si fuera un vaho, al menos eso conseguía que me mantuviese en pie, esperaba que Anneke no se diera cuenta o por le contrario quizás se apenara por el echo que no le conté lo que era, y no quería perder esta única amistad.

- Eh ... no ... no .. se .. cre... creo .. que es porque ... porque ... ahora estoy caminando un poco mas ... -

Dije como simple explicación ... odiaba tener que mentirle ... por ello me sentía fatal, pero ¿ que mas podía hacer yo ? si le contaba la verdad algún demonio se interesaría por ella, y entonces volvería a estar como cuando la encontré, y eso no podía ser ...

Me había descubierto ... no debí de haber saco las alas ... pero si le decía lo que era ... habia muchos humanos que habían conocido a sus ángeles y que saian que existian, de echo algunos incluso hoy en día seguían conviviendo con ellos, pero me daba miedo que Anneke no aguantara lo que yo era, que pensara que me había acercado a ella solamente para conseguir poder, y aunque baje a la tierra con ese motivo, lo cierto era que si ahora lo quería era para poder protegerla para siempre ...

- ¿ Si te digo algo seguirás siendo mi amiga ? ¿ no te enfadaras ? ¿ no dejaras de hablarme ? -

Le pregunte muy preocupada.

La cogí por la mano y la lleve a una parte aparta del parque, ya había echo desaparecer mis alas, así que me costaba mucho caminar, cuando lelge a la la aprte mas apartada donde nadie iba. Tras asegurarme que era así cerré los ojos y me transforme en Angel, sacando mis alas y después transformando mi aspecto de verdad, aunque no volaba estaba en el suelo.

- ¿ Ves ? No soy humana ... soy un ángel ... me ha resultado ... muy difícil no decírtelo ... porque eres la única amiga ... que he tenido .. ya que ni mis padres ... ni hermanas confiaban en mi ... hay varios como yo por esta parte de la ciudad y creo que mas en la academia ... cada uno se encarga de proteger a un humano, de ayudarlo, y de no dejar que lso demonios lo atormenten ... a mi me habían indicado que debía de porteger a otro ... pero me hice amiga tuya ...y supe lo que te había pasado ... as que decidí que debía de estar a tu lado ... no solo como amiga ... si no como ángel ... los ángeles bajamos aquí para obtener nuestro máximo poder ... cuando yo lo obtenga, mi salud se restablecerá ... ese fue el único motivo por el cual me dejaron bajar ... pero ellos me eligieron a un Elegido por mi ... se enfadaron cuando conocieron mi decisión de que tu serias mi Elegida ... espero que no te haya molestado ... que no te enfades ... y ... y .. que no ... que no ... que no ... que no quieras dejar de ser mi amiga ...porque .... bua ... porque ... porque ... aunque sea un ángel y tu mi Elegida ... eres ... eres ... mi amiga ... y el porque quiero ... el por... quiero ... con ... conseguir ... mi ... mi .. poder ... es para ser .. un ángel .. gu.. guardián ... y así ... ser .. ser .. amigas .. para siempre -

Termine de decir esto con los ojos llenos de lagrimas y caí al suelo de rodillas llorando.

Escuche como parecía ser que no se habia molestado para nada con lo que le habia dicho, con lo que le habia ocultado, note como caía al suelo y me abrazaba, parecía que ya estaba llorando al igual que yo, así que también la abrace haciendo que mis lagrima se hicieran mas intensas, note como dentro de mi crecía una fuerza nueva, una fuerza de ángel, mis poderes habían aumentado, no lo suficiente como para que alcanzase mis verdaderos poderes, me estremecí cuando me toco las alas, ya que no estaba acostumbrada a ello.

- Gracias ... gracias por ser mi amiga y por no enfadarte ... -

Dije intentando contener las lagrimas y apartándome para terminar de decirle todo, aun habían demasiadas cosas que Anneke desconocía.

- Hay .... hay mas cosas que tienes que saber ... aparte de nosotros ... de los ángeles ... también hay demonios ... que intentaran tentarte, hacerte sufrir ... y quiero ... que si eso llega a pasar ... me lo digas ... no quiero que vuelvas a sufrir ... como tu ángel ... como tu amiga ... no lo voy a permitir ... -

Dije con una sonrisa, en ese momento, algo me golpeo la cabeza fuertemente, parecía venir del cielo, yo caí en mi forma humana al suelo con los ojos dándome vueltas. Lo que me habia chocado no era ni mas ni menos que Ralfti, mi pequeña mascota, parecida a un extraño gato con alas de angel.

- BAKA!! Alejandra! ¿ como se te ocurre revelar lo que eres ? ¿¡ te has vuelto loca¿! -

-@_@ Ralfti ... -

- Ahora no queda mas remedio ¬¬ eres imposible Alejandra!! -

- Solo quería que Anneke supiera que podía confiar en mi T_T -

Ralfti se giro y se puso a volar delante de los ojos de Anneke.

- ¿ Quieres que Alejandra sea tu protectora, quien te cuide, tu enlace con el mundo sobre natural ? ¿ o preferirías que fuera un demonio ? -

- AH! ¿ Como se te ocurre decirle eso ?!! -

- Tu le dijiste todo, pero ella tiene que elegir ahora ... -

Contuve el aliento mientras que Anneke pensaba su respuesta, seria lógico que prefiriera esperar para decidir, ya que estas cosas no eran fáciles, así que solté todo el aire de golpe cuando me di cuenta de que habia decidido, de que yo seria su enlace a lo sobre natural, lo cierto es que me sentí muy feliz al saber que estaba cumpliendo bien mi trabajo y que así podría ayudar mas fácilmente a Anneke, por alguna razón era como si mi pequeña mascota estuviera muy preocupada por lo que acaba de pasar, antes siquiera de que pudiera reaccionar, un brillo potente salio de mi pecho, apenas era un pequeño destello cuando se acerco a Anneke.

- Tu ... protección ... -

Fue todo lo que dije, sabia que ahora mis poderes aumentarían en el momento en el cual Anneke tocara aquel fragmento de alma, los ángeles solo podíamos dar dos fragmentos ... pero yo solo habia dado uno ¿ entonces porque sentía que ya habia dado dos, y cada uno tan diferente ? no lo entendía ...